El presidente de Honduras recibió oxígeno por la dificultad respiratoria asociada a la COVID-19

El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, se mantiene «estable» tras la confirmación del diagnóstico de COVID-19, aunque tuvo que recibir oxígeno para paliar las consecuencias de una neumonía, que le ha provocado problemas respiratorios, según el parte médico difundido el martes.

Hernández permanece ingresado en el Hospital Militar de Tegucigalpa, mientras que su mujer, que también ha dado positivo, está aislada en su domicilio, asintomática. El mandatario reapareció el domingo con un mensaje de voz en el que pedía unidad frente a «la más dura de las batallas».

El teniente coronel Juan Díaz Siguense ha sido el encargado de dar el último parte médico, asegurando que «la evolución del señor presidente es estable, pero continúa bajo observación y delicado». La dificultad respiratoria ha disminuido de forma «importante», lo que denota «una franca mejoría», informa el diario hondureño ‘La Prensa’.

Además de la dificultad respiratoria, el presidente también presentaba el día de su ingreso, el 16 de junio, decaimiento, tos y fiebre. El examen radiológico permitió detectar una neumonía y fue entonces cuando su equipo médico optó por realizar ajustes a su tratamiento, incluyendo la aplicación de oxígeno», según Siguense.

Honduras ha registrado hasta este martes 13.943 casos de coronavirus, 587 más que en el balance anterior. El Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager) también ha informado de diez muertes más, lo que eleva el balance provisional de fallecidos hasta los 405.El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, se mantiene «estable» tras la confirmación del diagnóstico de COVID-19, aunque tuvo que recibir oxígeno para paliar las consecuencias de una neumonía, que le ha provocado problemas respiratorios, según el parte médico difundido el martes.

Hernández permanece ingresado en el Hospital Militar de Tegucigalpa, mientras que su mujer, que también ha dado positivo, está aislada en su domicilio, asintomática. El mandatario reapareció el domingo con un mensaje de voz en el que pedía unidad frente a «la más dura de las batallas».

El teniente coronel Juan Díaz Siguense ha sido el encargado de dar el último parte médico, asegurando que «la evolución del señor presidente es estable, pero continúa bajo observación y delicado». La dificultad respiratoria ha disminuido de forma «importante», lo que denota «una franca mejoría», informa el diario hondureño ‘La Prensa’.

Además de la dificultad respiratoria, el presidente también presentaba el día de su ingreso, el 16 de junio, decaimiento, tos y fiebre. El examen radiológico permitió detectar una neumonía y fue entonces cuando su equipo médico optó por realizar ajustes a su tratamiento, incluyendo la aplicación de oxígeno», según Siguense.

Honduras ha registrado hasta este martes 13.943 casos de coronavirus, 587 más que en el balance anterior. El Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager) también ha informado de diez muertes más, lo que eleva el balance provisional de fallecidos hasta los 405.

 

FUENTE CALLE 56