Un llamado a la sensatez en San Francisco de Macorís a propósito de los JEDN 2025
Por Lincoln Minaya
San Francisco de Macorís, R.D. – Resulta lamentable que, justo en el momento en que nuestra ciudad se encuentra en el centro de la atención nacional con la celebración de los Juegos Escolares Deportivos Nacionales 2025 organizados con acierto por el Instituto Nacional de Educación Física (INEFI), se haya lanzado un llamado a huelga para los días 7 y 8 de octubre.
Se trata de un acontecimiento histórico para San Francisco de Macorís. Cerca de cinco mil atletas, acompañados de sus dirigentes, técnicos y familiares, se han dado cita aquí, convirtiendo a la ciudad en el epicentro del deporte escolar dominicano. El impacto ha sido inmediato: las plazas hoteleras se encuentran totalmente ocupadas, así como la oferta de hospedajes alternativos como los AirBnB, generando un movimiento económico sin precedentes.
En este contexto, hablar de huelga no solo es inoportuno, sino que constituye un desaire a San Francisco de Macorís y a todo el esfuerzo colectivo que nos ha permitido proyectar, en los últimos años, una imagen positiva y de progreso. Un paro en medio de esta fiesta del deporte no haría más que empañar la alegría y el orgullo de un pueblo trabajador que hoy muestra al país lo mejor de sí.
Como ciudadano nordestano y como comunicador, me veo en la obligación de hacer un llamado a la sensatez. Las luchas sociales son válidas, pero deben enmarcarse en un ejercicio de responsabilidad. No se trata de desconocer las reivindicaciones, sino de comprender que existen momentos que demandan prudencia, tacto y visión de futuro. Este es uno de ellos.
San Francisco de Macorís ha demostrado ser una ciudad vibrante, de oportunidades y de progreso. No podemos permitir que la imagen de esta ciudad laboriosa y progresista quede a merced de un pequeño grupo dispuesto a sacrificar el bien común en aras de la confrontación. La grandeza de una comunidad se mide también en su capacidad de elegir la paz sobre el conflicto y la construcción sobre la destrucción.
Hoy más que nunca, debemos cuidar lo que hemos conquistado: la proyección nacional, la confianza y el orgullo de ser anfitriones de un evento que pone en alto el nombre de la ciudad del Jaya. Que prevalezca la sensatez, que reine el entendimiento, porque San Francisco de Macorís merece ser recordado como la ciudad del deporte, la hospitalidad y el desarrollo.
Pie de foto
Moderno ring de boxeo instalado en la cancha Pedro Emilio Reyes, del Club San Vicente de Paúl.
